El Papa Benedicto 16 (si me sé los números romanos, pero... ¿cuál es la idea?) recibió esta mañana al nuevo embajador chileno en el Vaticano (¡uf!... cuánta pega), Pedro Pablo Cabrera Gaete.
Aparte de celebrarle su tan apropiado nombre de pila, el pontífice destacó que Chile "ha logrado metas de desarrollo notables y prospera un clima de convivencia pacífica".
Emocionadísimo, el equipo político y económico habría querido retribuirle tanto reconociemiento manifestando que en el ámbito religioso-espiritual también estamos hechos un fenómeno, pero no fue posible.
08 septiembre 2006
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario