tu también (yutú)

En realidad no hay mucho que decir sobre el segundo mejor espectáculo que se ha presentado en Chile (el mejor, según todo el mundo, han sido los mismos U2 con su gira "Pop Mart"), había que "simplemente" (lo digo por lo difícil de onseguir entradas) estar ahí. Aún sin conocer el repertorio como los más fanáticos disfrutar el espectáculo mas impresionante del mundo es de locos. Todo empieza con City of Blinding Lights y Bono enfundado en una chaqueta con la bandera del "new Chili" nombrando a Santiago y Punta Arenas entre las grandes capitales del mundo, luego todo el estadio explota cuando pide que le ayuden a contar "uno, dos, tres... catorce!" y el concierto se va por un tubo de éxitos y matices, incluida la performance de Adam Clayton y Larry Mullen en las pasarelas del escenario, los gateos de Bono sobre la misma y la alucinante pared de efectos que The Edge utiliza para dar ese toque característico del sonido U2. El jueguito de los celulares se vio impresionante por la cantidad de luces y aunque la pantalla no fue tan protagonista como en "Pop Mart", tuvo su mayor protagonismo cuando se desplegó sobre ella la declaración universal de los Derechos Humanos y cuando asemejó una máquina tragamonedas que al detenerse mostraba distintos íconos chilenos, desde Pinochet (impresentable) hasta Michelle Bachelet. Más de dos horas y media de un concierto que bien vale cada peso para quien haya conseguido entrar y que hizo avergonzar a quien se haya entusiasmado con el "espectáculo" festivalero viñamarino de esos días.

cuestión de peso

Encontré algo más resistente y odioso que una piedra en un zapato, un vidrio empañado, una pulga en el oído, un hipo, un mechón despeinado, un vendedor de enciclopedias y un mormón en la puerta una mañana de sábado... JUNTOS!:

Un vendedor de batidos herbalife ("erbalaif")

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¿QUIERE CONTROLAR SU PESO?

¡Pregúntele a otro cómo hacerlo!

punk you

He andado ya un tiempo con un corte de pelo un poco extraño, incluso para mí y la verdad es que no hay mucha diferencia, salvo que me siento más seguro en los supermercados porque camino con un guardia siempre al lado y tengo mucho espacio porque las señoras de bien se alejan cuando me ven (obviando mi polera de 'Jesús la lleva'). Uno que otro canuto no está de acuerdo con usar el pelo de otra forma que no sea la raya al medio o a un costado pero, extrañamente, a los más viejos y/o más maduros les da igual. Hay otros que reniegan incluso del gel, pero eso ya es un caso para especialistas jajaja. En la iglesia de mi abuela, en Talca, me recibieron con mucho amor sin saber que yo también soy cristiano (aunque después mi muy sociable tía María Cristina me hizo pararme ante la congregación y saludar) a pesar de que eran en gran parte, hermanos de la tercera edad.

No hay que ser punk pa llevar mohica ni hay que llevar mohica pa' ser punk y eso se agradece especialmente en Concepción donde la única labor de quienes se identifican con esa 'onda' es pedir plata afuera de los supermercados (preferentemente Santa Isabel de la diagonal, el más caro de la ciudad) para tomar cerveza... es decir, no sólo son parte del sistema, sino que son parásitos de él... aunque ellos crean que se desprenden de la 'maquinaria capitalista' rebelándose contra el sistema, lo cierto es que hay que financiarles su rebeldía... ¿algún otro comentario?

Es sumamente fácil identificarse con ciertos grupos por características externas, y es más fácil para todos, me incluyo, estereotipar a estos grupos positiva o negativamente desde esa base. Lo complicado es identficarse por lo que uno cree, porque hay muchas corrientes que intentan imitarse unas a otras y no hay muchas oportunidades para decir lo que uno quiere. De todas formas, me sentí más juzgado como 'punk' que lo que me he sentido como cristiano toda mi vida (me refiero, por parte de la sociedad), pero también es cierto que aunque las personas no tengan la más mínima idea de qué se trata lo que uno cree, estarán ahí para refregarte lo que a juicio de ellos uno no debiera hacer por ser crisitiano.

donde fuego hubo...

(RANCHILLO) Me estaba levantando para irme con Rodrigo (Valladares) a Concepción y, francamente, lo primero que pensé fue que alguien se había olvidado de las tostadas. Caminé hacia los baños despreocupadamente hasta que vi un poco de humo tras el galpón y a Sotito (con mucho cariño el apodo) gritando que se necesitaban los extintores... como todo el mundo, no reaccioné a buscar el extintor, sino que a cachar qué pasaba. Los hermanos (y público en general, valga la aclaración) llevaban tiestos con agua, arena, sal y algunos iban con extintores... entonces me di cuenta que era en serio.

Corrí (así es, señoras y señores) hasta donde los Muñoceces a decirles que había principio de incendio y que necesitaba el extintor del auto, me lo pasaron y además una cuestión pa llevar agua. En el camino me encontré con un niño que no se podía el agua, así que la tomé y seguí corriendo. Al llegar estaban todos en estado de histeria colectiva (supongo que no era momento para "la paz de Jesús"), dentro del galpón habrían pinturas, soldaduras y un balón de gas de proporciones descriteriadas que se convirtió rápidamente en el antagonista de todo esto... o bien en el inocente a quien rescatar, porque si lo alcanzaba el fuego se supone que volabamos todos... aunque pensándolo bien, si estaba ahí es porque estaba ultra vacío, pero en fin... más vale prevenir que curar.

Cuando las operaciones bomberiles lograron aplacar el fuego y llegar a la obvia, pero necesaria, etapa de "hay que destruir todo" me di cuenta que metido donde las papas queman (qué apropiado!) estaba mi compadre Titín Balboa aplicando sus conocimientos. Fue el único que entró con algo mojado cubriéndole la cara para evitar intoxicaciones. Fue algo así como un héroe anónimo, pero fue bueno saber que estaba ahí para disipar las ideas inúiles de los inexpertos acerca de cómo combatir el fuego. Gracias a Dios, todo salió bien y el susto pasó. Pero por favor, ante un hecho así NADIE puede decir "vuelvan a sus actividades con normalidad"!.