25 junio 2007

pucón

Después de pasar de Argentina a Chile y de manejar todo el día en definitiva, llegamos a Pucón.
Había una lluvia terrible y ni siquiera se veía mucho. El "Gran Hotel" no tenía cartel, así que tuve que entrar para asegurarme que era ahí. Nos recibió don Sergio, el botones... muy amable pero ni siquiera habíamos cambiado la plata argentina: "Mañana, cuando haya descansado y cambiado plata me pongo más cariñoso, don Sergio" le dije.
Al día siguiente salimos a dar unas vueltas, almorzamos (comí un salmón increíblemente bien preparado... en un restaurant en calle Fresia esquina O'Higgins, no recuerdo el nombre del lugar), curioseamos por el hotel y alrededores y a dormir...
Al día siguiente, cuando bajábamos al desayuno, se nos acerca don Sergio para decirnos que el auto tenía un vidrio roto, yo pensaba que a lo más se había trizado o algo pero estaba completamente destruido... nos sacaron unas chaquetas y mi mochila.
Increíblemente el Gran Hotel Pucón no tiene estacionamientos para los pasajeros sino sólo para quienes arriendan departamentos; afortunadamente, dejamos el auto estacionado en una media luna que hay frente a la entrada principal, o sea, no en la calle sino en propiedad del hotel, por lo que pedí hablar con el gerente para que respondieran por los daños. Pese a que insínuó una corrida ("la política del hotel es que si un auto está en la calle..." alcanzó a decir antes que la Patata y yo casi al mismo tiempo le ilustráramos que el auto no estaba en la calle) respondieron muy bien y rápidamente; van a correr con los gastos de la reposición. Lo que resultó más impresionante es que el sr. Palma (gerente) nos dijo que estos hechos ocurren habitualmente frente al hotel y que sólo en temporada alta arriendan un estacionamiento con seguridad fuera del recinto.
Luego de pasar a dejar constancia de todo en Carabineros, empezamos el regreso a Santiago.

No hay comentarios.:

 
Alfonso Levet 2010. Algunos Derechos Reservados Alfonso Levet. Blog alojado en Blogger Plantilla creada por Deluxe Templates.