20 abril 2006

santa semana, batman!

Domingo de ramos
Ya sea que, como en mi caso, salgas de tu casa a canutear temprano o simplemente vayas al supermercado... alguien te va a salir al paso tratando de venderte en un par de monedas (seguramente) alguna rama que debieron sacar de algún jardín cercano. Más bien me dan ganas de mojarla en alguna mezcla cebollenta como pa salpicar un asado, pero creo que se sostienen en la mano durante la liturgia de ese día o algo así.
Lunes, Martes y Miércoles Santurrones
Todo el mundo trabaja y los más previstos compran algunos huevitos de chocolate, sólo chocolate y no falta el que sólo compra huevos.
Jueves Santísimo (felicísimo)
En este día la mayoría de quienes van a aprovechar el fin de semana "largo" (y no "santo") ya han hecho planes no muy santos y se aprestan a tomar buses para ir a cualquier lugar o simplemente llegan a descansar a sus casas.
Viernes Santo
En este día dan clásicos de la televisión abierta como "Jesús de Nazaret" de Franco Zefirelli, películas sobre los apóstoles (sacros o apócrifos a estas alturas), dibujos animados como "El burrito pardo" o "El cuarto rey Mago"... a propósito, ¿a alguien le consta que eran tres?. Nadie sabe por qué, pero todos comen pescados y mariscos comprados a precios estratosféricos para evitar la carne. Algunos sufren e incluso andan con cara de congoja convencidos de que Jesús está sufriendo... es un día de profunda reflexión, cierran los principales centros comerciales y los más devotos ni siquiera hacen actividades esperando que llegue el...
SÁBADO SANTO!
Al borde del colapso, los más consumistas hace fila frente a las tiendas a las 10 y media. Otros comen, aliviados y sin sentimiento de culpa, un buen bistoco con papas y vino tinto. Día de paseítos y visitas familiares; de nuevo todo el mundo puede hacer lo que le plazca!!!... pero sin hacer mucho ruido porque todavía falta lo mejor.
San Domingo
Jurando de guata que Jesús muere y resucita todos los años, todos andan un poco más alegres que de costumbre. Los niños buscan los huevitos de chocolate que escondió algún pariente cercano (trámite que, según recuerdo, puede tardar algunas horas incluso) pero se supone que los arrojó un conejito travieso por una cavidad corporal que no quisieran recordar; es abrir los regalos de Navidad, salvo que en esta ocasión todos saben cuál es el regalo. Algún curita "lolein" le pide al cristianísimo Joe Vasconcellos que celebre la resurrección con los muchachos que, muy sobrios, se han reunido en Plaza Italia. Ya muchos piensan en la pega y/o estudios del día siguiente contentos de haber consagrado, sumando horas, casi medio día a acordarse de Dios.

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